Múnich es la capital de Baviera, en el sur de Alemania, y cuenta con más de 1,5 millones de habitantes. Atravesada por el río Isar que desciende de los Alpes, Múnich es una ciudad muy verde. Su famoso Jardín Inglés, situado en el nordeste de la capital bávara, consta de 4,17 km² de zona verde. Múnich es una de las ciudades más ricas de la Unión Europea, gracias a la presencia de las sedes de grandes empresas como BMW, Siemens o Allianz. Múnich es una mezcla perfecta de tradición y modernidad, y es famosa por ser una de las ciudades más habitables del mundo. Además, la ciudad es conocida en todo el mundo ya que desde hace 200 años se celebra aquí el famoso Oktoberfest, el mayor festival de la cerveza del mundo. Durante el mes de diciembre también puedes visitar su mercadillo navideño, que data del siglo 14. Viaja en autobús a Múnich y descubre la tercera ciudad más grande de Alemania.

Qué ver en Múnich

En Múnich nunca te aburrirás, ya que siempre hay algo diferente que hacer. Tanto si se trata de un concierto, una exposición, un museo que visitar o una fábrica de cerveza que descubrir, siempre tendrás algo nuevo que hacer. Cuando tu autobús llegue a Múnich, tu primer destino será probablemente Marienplatz, la plaza situada en el corazón de la ciudad. Aquí podrás admirar el nuevo ayuntamiento de la ciudad, un enorme edificio gótico inspirado en el ayuntamiento de Bruselas. Si te encuentras aquí a las 11, podrás escuchar las famosas campanadas del ayuntamiento. Si te apetece disfrutar de la naturaleza, podrás hacerlo en alguno de los muchos parques de la ciudad. Aquí te podrás relajar, descansar o tomar una cerveza. Porque sí, los típicos Biergarten están por toda la ciudad. Entre los numerosos museos de la ciudad, destacamos la Pinacoteca de Múnich, que recoge impresionantes colecciones de pinturas. Otra de las maravillas de Múnich es el Castillo de Nymphenburg, construido en el 1730, que fue la residencia de verano de la familia Wittelsbach, que gobernó Baviera.

Múnich : Cultura e historia

En el siglo 2, uno de los recursos más importantes era la sal. La producción se encontraba en las grandes ciudades del sur de Alemania, como Salzburgo y Berchtesgaden, que transportaban sus productos hacia el norte por carretera. Múnich fue fundada por encontrarse en una de las rutas de la sal. En el año 1182 se fundó la dinastía de Wittelsbach, que rigió Baviera durante 800 años. Bajo el reinado de Luís I de Baviera, Múnich se convirtió en un centro artístico y durante este período se construyeron algunos de los edificios más imponentes que podemos encontrar hoy en día. Su hijo, Luís II de Baviera, patrocinó unos de los castillos más bellos de Alemania: el Castillo de Neuschwanstein que inspiró el logo de Disney, el Castillo de Linderhof y el Castillo Herrenchiemsee. El castillo de Neuschwanstein es una maravilla arquitectónica. Fue construido en un acantilado en el sur de Baviera y, a pesar de nunca haber sido completado, reúne cada año 1,4 millones de visitantes.

Múnich de noche

Al pensar en Múnich probablemente piensas en Oktoberfest, el mayor festival de la cerveza del mundo. Pero Múnich no solo ofrece una animada vida nocturna durante el período de septiembre a octubre, sino que ofrece una única variedad de actividades durante todo el año. Cuando tu autobús llegue a Múnich, descubrirás que la vida nocturna en la ciudad es tan versátil como la ciudad misma. Los amantes de la cultura tradicional bávara deben visitar la famosa Hofbräuhaus. La fábrica de cerveza ha existido desde el año 1589 y consta de un ambiente amigable y tradicional. Aquí verás personas vestidas con ropa tradicional de la región de Baviera y una banda toca todas las noches música tradicional. Si vas al barrio de Schwabing, descubrirás muchos bares frecuentados por jóvenes. En Stammbar puedes hacer tu propia cerveza y, si eres fan de la Ginebra, ¡Couch Club ofrece más de 130 variedades! Y, si sueñas con encontrarte con alguno de los jugadores del FC Bayern, visita la discoteca más exclusiva de la ciudad: la famosa P1.

Hechos interesantes sobre Múnich

Seguro que has oído de la famosa Oktoberfest, que se celebra cada año en Múnich, pero ¿sabes el origen de la mayor fiesta de la cerveza del mundo? El primer Oktoberfest se celebró en el año 1810 con la ocasión del matrimonio de Luís I de Baviera con la princesa Teresa de Sajonia-Hildburghausen. El lugar donde se repite cada año esta festividad se llama Theresienwiese, en honor a la princesa. Desde este matrimonio, cada año se lleva a cabo una celebración en Theresienwiese. Oktoberfest ha sido cancelado algunos años debido a que la situación política en Múnich era complicada o porque el país estaba en guerra. Hoy en día, Oktoberfest atrae a más de 6 millones de turistas de todo el mundo y se venden también más de 6 millones de litros de cerveza. También encontrarás una gran variedad de atracciones de feria y multitud de tiendas. En Múnich siempre hay algo nuevo que descubrir. Este Halloween, por ejemplo, podrás disfrutar de un tour nocturno por las calles de la ciudad, donde podrás descubrir las leyendas e historias más aterradoras de la historia de la ciudad, en los lugares más terroríficos, en medio de la noche. Compruébalo durante tu viaje en bus a Múnich.

Los alrededores de Múnich

Múnich es, sin duda, el corazón de Baviera, pero en sus alrededores encontrarás también paisajes idílicos. Cuando viajes en bus a Múnich no dudes en visitar también sus alrededores. Al suroeste de Múnich está el lago más grande de Baviera, el Chiemsee. Situado a los pies de los Alpes alemanes, fue tallado por un glaciar. En el centro del lago hay tres islas y, en una de ellas, el rey Luís II de Baviera ordenó la construcción de una réplica del Palacio de Versailles: el Palacio de Herrenchiemsee. También puedes viajar en bus hasta el suroeste de Múnich, donde se encuentra la pequeña ciudad bávara de Garmish-Partenkirchen. Situada a los pies de Zugspitze, el pico más alto de Alemania. Desde su cima, las vistas son increíbles. Si el cielo está claro podrás ver, al norte, Múnich y Alemania, al sur los Alpes austriacos y las Dolomitas en Italia y al oeste verás las montañas suizas. Por último, si quieres visitar un castillo de cuento, te recomendamos visitar el famoso castillo de Neuschwanstein, que inspiró el logo de la marca Disney.

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